jueves, abril 12, 2007

Kurt Cobain, la última estrella del rock

Kurt Cobain, el tipo de aspecto desaliñado, de ojos angelicales y mirada inocente, de alma torturada y creativa, drogadicto, depresivo, suicida, lo tenía todo para triunfar precisamente por estos componentes. Sólo bastaba que le acompañara una música de querencias inadaptadas y generacionales, que según muchos críticos expresaba "la frustración de los adolescentes en un mundo capitalista" y ese tipo de cosas que yo nunca he sabido ver ni en Kurt ni en las canciones que hizo su grupo Nirvana. Recuerdo el hondo impacto que causó el disco Nevermind cuando yo tenía apenas catorce años. Sonaba en todas partes, y "Smells Like Teen Spirits" fue una profunda estocada en el subconsciente juvenil, una potente, pegadiza, rabiosa canción cuya sangre circulaba con tanta agresividad que literalmente parecía a punto de explotar en cualquier momento.

Cabe preguntarse si Nevermind era para tanto. A mí me gustó mucho por entonces, claro que también solía llevar una camiseta con la cara de Cobain, y me parecía un tipo muy profundo y lleno de talento, como se lo parecía a casi todos mis compañeros de instituto. No era de extrañar, respondía a la perfección al arquetipo de héroe romántico que tanto tirón ha tenido siempre, insurrecto y tan sensible que era incapaz de soportar la vida. Con el paso del tiempo, su figura va perdiendo peso y uno la contempla con la misma credibilidad que tiene una estampa del Che u otros tantos héroes del mundo. Lo peor de todo es que para abordar a Nirvana como grupo parece inevitable hacer como mínimo varias referencias a la desgraciada vida de Cobain, un espíritu sin rumbo víctima de las drogas y de su malvada esposa, Courtney Love.

Centrémonos en el disco que los llevó directamente al número uno. Si no fuera por el carisma de Cobain y su buena imagen, no habría recibido ni mucho menos tanta atención. Un carisma muy bien acompañado por una apreciable colección de canciones, todo sea dicho, y además con unas baterías muy rabiosas pero también muy limpias y amigables, unas guitarras cortantes pero al mismo tiempo domadas y sumisas, y especialmente la voz de Cobain, atractiva, joven, competente para la radiofórmula. Nada que ver con Iggy y los Stooges, Sonic Youth, Dinosaur Jr o los mismos Pixies, a los que tanto admiraba y de los que tanto aprendió (casi como de Hüsker Dü). Aquello era un producto perfectamente enlatado, eso sí, de una calidad inusitada para ese tipo de lanzamientos. Pero en último término, "Come As You Are" se hace demasiado insustancial, "Polly" casi ridícula en su descarada pose derrotista y "Something In The Way", directamente soporífera. "Smells Like Teen Spirits" brilla con luz propia, desde luego que sí, y también me gusta la extravagancia de "Lithium" y arrebatos de energía como "Lounge Act" o la triste, desesperanzada, sincera, áspera "On A Plain". Demasiado poco para un disco que es calificado constantemente como uno de los mejores de la historia del rock. In Utero, el siguiente, es mucho más interesante.

No hay más que comparar Nevermind con otros discos del mismo estilo, grabados aproximadamente en los mismos años. Siendo sincero, prefiero el surrealismo fascinante y juguetón del Slanted and Enchanted de Pavement, que transmite mucho más entusiasmo, y sentido del humor, y todas esas cosas que hacen que un disco no vaya muriendo con el paso de los años. Hasta me parece más auténtico el arrastrado y admirable en su sinceridad Live Through This de Love, el grupo de su esposa. Por no hablar de esos discos cargados de extrañas e hipnóticas esencias y olores, de magia y psicodelia, que grabaron los nunca suficientemente valorados Screaming Trees. Creo que Nirvana están artísticamente muy por debajo de todos ellos. Sin embargo, llegaron mucho más alto. Como dijo Kurt Cobain, en un arranque de franqueza: "Está claro que la mayoría de nuestros fans son gente que no saben mucho de música alternativa. Escuchan a Guns n’Roses, quizá hayan oído algo de Anthrax. No puedo pretender que entiendan el mensaje que tratamos de lanzar, pero al menos captamos su atención". Muchos de sus fans de entonces actualmente están perdidos en recopilaciones de Rammstein o, peor aún, de Extremoduro.

No quiero decir con todo esto que Kurt Cobain no fuera honesto. Todo lo contrario, al ver los documentales despierta simpatía por su perfecta toma de conciencia de la situación en la que se encuentran, su empeño en defender la música que aman, un amor verdadero en el que ganar mucho dinero fue más una cuestión de contigencia que algo buscado. El problema es que Cobain, dentro de esa espiral de fanatismos y admiración, terminó por creerse su propio personaje y se voló los sesos. Ahí finalizo la carrera de esta auténtica y última estrella del rock, de un apasionado que estaba en la música porque no podía evitarlo, y no por los motivos de esa gente que hacen proclamas contra la piratería, que reciben absurdos premios continuamente y que no vacilan en autodenominarse artistas sin que se les caiga la cara de vergüenza.

11 comentarios:

Eclipse dijo...

Kurt Cobain... qué decir sobre él. En mi adolescencia fui marcado por Nirvana, y aún hoy llevo con orgullo esa sobada camiseta de Kurt, con ese 1967-1994 impreso. Una camiseta que un día fue negra y ahora a penas es gris. Ahora no escucho a Nirvana, aunque a veces esa All Apologies suene con toda su sinceridad en mi equipo, pero formaron parte de una etapa importante de mi vida, una etapa que creo que todos los jóvenes con incertidumbres pasamos. Tarde o temprano creo la mayoría tiene una epoca Nirvana. Y es que From The Muddy Banks Of Whiska fue el primer compacto que compré con mi dinero...

En el tema musical creo que se ha magnificado a Kurt y a Nirvana precisamente por su triste final, pasando a formar Cobain parte del selecto club de los 27, como Hendrix, Joplin, Jones, Morrison y Robert Johnson. La muerte mitifica y sin duda alza un peldaño por encima de los demás.

Forever 27...

Un saludo!

Anónimo dijo...

No estoy yo, Eclipse, del todo de acuerdo en que a Nirvana se les magnificase por la muerte de Kurt. Para entonces ya eran megaestrellas fabulosas, basadas en el "Nevermind", y también bastante en la actitud vital de Kurt y en los conciertos del grupo, que eran para los millones de fans requerimientos de obligado cumplimiento.

Como parece que tu canción favorita es "All Apologies" quizás te interese saber que la serie "Caso Abierto" tiene un capítulo basado en esta canción. Es el que pusieron en la Fox la semana pasada, así que todavía andarán repitiéndolo. Va sobre un chaval que se mata cayéndo desde un tejado y como era admirador de Kurt y seguía su forma de vida y todo eso, al principio lo dan como un suicidio, igual que su ídolo. El capítulo se iba a llamar como la canción, que sería además la que iba a cerrar el capítulo, con los créditos, y la iban a abrir con el "Come as you are", pero la discográfrica puso muchas pegas y al final abrieron y cerraron con los Offsprings y los Smashing Pumpkins respectivamente. Y le cambiaron el título por "Detention". De todas formas, aunque haya perdido con los cambios, si te gusta esta serie, el episodio está bastante bien y lleno de referencias a Nirvana, Coutney Love y el grunge en general.

Eclipse dijo...

Carrascus, llevas toda la razón en lo que dices sobre que Nirvana ya eran megaestrellas. No me expresé bien puede, a lo que yo me refería era a que esa aureola de mitos viene precisamente dada por la muerte de Kurt. Supongo que "magnificar" no era la palabra, mejor "mitificar".

Por otro lado muchas gracias por la recomendación. Por suerte tengo la Fox en casa y estaré atento a las repeticiones. Por cierto, me gustaría saber qué opinas sobre la posible conspiración que habla de que la muerte de Cobain no fue en realidad un suicidio... y es qu viendo a Courtney Love esa puerta queda abierta :)

Un saludo!

Anónimo dijo...

Pues hombre, nunca me he parado a pensar mucho en eso, pero así a bote pronto me inclino más por el suicidio, sobre todo debido a la cantidad de "pruebas" que muchos muestran en contra. Verás... si hubiese una o dos cosas que demostrasen abiertamente que no fue un suicidio, pues podríamos tomarlo en serio; pero cuando hay tantísimas y tan dispares: que si no había huellas dactilares suyas en el arma; que si había más de una nota de suicidio; que si alguien seguía usando sus tarjetas de crédito después de su muerte; que si Courtney Love pagó a uno para matarlo; que si hasta el padre de Cortney piensa que si su hija no lo mató ella misma, al menos lo llevó a la muerte emocional... en fin, que hay tantas cosas colgadas que el conjunto de todas ellas es imposible. Las cosas siempre son más sencillas de lo que parecen y seguramente un tío que desde muy joven ha vivido abrumado por cosas que se le iban de las manos, inmerso ahora en un matrimonio muy turbulento, con problemas de drogas y con un dolor crónico de estómago que hacía que su vida no fuese fácil precisamente, pues tomó ese camino.

Se dice que la gente creativa sufre desórdenes depresivos tan desproporcionados que no es difícil que les lleven al suicidio. Y aunque ésto sea una aseveración que no se pueda demostrar quizás tenga una base que la apoye en la cantidad de ejemplos que tenemos, desde Johnny Ace a Ian Curtis pasando por Phil Ochs.

Mr. Glasshead dijo...

eclipse: yo también conservo todavía esa misma camiseta, sólo que en color blanco. Está claro que es un grupo que marca, sobre todo a esas edades, aunque lo que pretendía era más bien valorar si la música estaba a la altura del mito, y creo sinceramente que no. Aunque me gusta mucho In Utero y ese sonido cortante y áspero que le da Albini a las guitarras. "All apologies", por ejemplo, no la soporto en el unplugged, me parece cansina, pero en la versión del disco, cuando entran las guitarras es realmente alucinante. Muy bueno. Pero Screaming Trees le dan mil vueltas en todo.

Carrascus: en cuanto a la muerte de Kurt pienso igual que tú: depresivo, drogas, dolor de estómago y matrimonio perturbador y, creo yo, una asunción exagerada de su propio personaje. De alguna manera hizo lo que en el fondo se esperaba de él.

Anónimo dijo...

Me alegra que cites a Screaming Trees. "Buzz Factory", por ejemplo, es mejor disco (en mi opinión)que "Nevermind".

¿Para cuándo una reseña de Built to Spill?

Mr. Glasshead dijo...

Hola eguzkilore, Screaming Trees es un grupo increíble del que quiero escribir algo pronto. Muy buenos y, como suele ocurrir en estos casos, no tan reconocidos como debieran serlo. Para mí Buzz Factory también es mucho mejor que Nevermind.

Es curioso lo que dices de Built To Spill, mientras escribía este post me acordé de ellos y es fácil que también haga un artículo algún día, estuve mucho tiempo escuchando el Perfect from Now On y el There's Nothing Wrong with Love.

Anónimo dijo...

Built to Spill fueron para mí un descubrimiento bastante reciente. De hecho si no hubiera sido por las descargas, no creo que me hubiera animado a gastarme el dinero en sus discos, los cuales situaba (gnorancia la mía) cerca del post-rock.

De todos ellos mis favoritos son Keep it Like a Secret (el que más) y Ancient Melodies of the Future (sólo por contener "Alarmed" ya merece la pena). A There's Nothing Wrong With Love no le he prestado demasiada atención y Perfect From Now On, a pesar de darle un montón de oportunidades no me termina de entrar (¿demasiado monocorde quizás?.

Saludos.

Anónimo dijo...

Aparte del movimiento grunge que podíamos ver en la superficie (nirvana, mudhoney, pearl jam, Dinosaur Jr, etc), ¿qué hay de grupos como Sailordoom o Sad-Z? ¿Qué ha sido de ellos?

Mr. Glasshead dijo...

Eguzkilore: está claro que "A there's Nothing..." suena muy distinto al resto de sus discos, pero las canciones son estupendas, aunque no tan personales y más ceñidas a los cánones indies. A mí "Perfect From Now On" me encanta, no lo veo monocorde, siempre me ha gustado entregarme a esas canciones tan largas, pero que no caen nunca a mi parecer en la derivación, y que proponen varios caminos diferentes al mismo tiempo.

anónimo: no conozco nada en absoluto de esos grupos que citas. Me informaré.

Anónimo dijo...

hey...yo he visto ese capitulo de caso abierto...hay una escena en la que explica porque le gusta Nirvana..en serio, muchos de aqui os sentiriais identificados.
ah...a lo 16 tuve la suerte de encontar en una vieja tienda de vinilos de la capital, uno de los 3000 primeros Nevermind que salieron, y que venian con un defecto: no incluian en la ultima pista "endless nameless", es increible,y cada vez que me levanto veo el vinilo en mi estanteria me sieto bastante afortunada, es una chorrada, pero desde q Barret Jones me enseño " rape me" esa voz y esa musica em han acompañado toda mi vida.
un saludo.
-tina