Si algo no se puede negar a los Beach Boys, que a comienzos de los setenta dejaban atrás su estandarte como grupo de culto, es su intensa capacidad de trabajo y de autoperfeccionamiento. En 1970 graban Sunflower, que continúa siendo ignorado en América pero que en Gran Bretaña es saludado como el Sgt. Pepper de los Beach Boys. De cierta manera, la semilla aquí plantada terminaría por germinar en su último gran disco, Surf's Up. Sin embargo, podemos ver varios avances con respecto a 20/20: una mayor cohesión entre las canciones, una minuciosidad instrumental y vocal a prueba de balas y, en resumen, una obra de artesanía en toda regla en la que todos aportan su grano de arena.
Sunflower es un disco esforzado, valiente, honesto, con el que los Beach Boys luchan de nuevo por situarse en la cresta de la ola en unos años que ya no estaban hechos para ellos. La participación de Brian Wilson es mínima, pero todos se imbuyen de su talento para fabricar una caja de música en la que cualquier detalle suena bonito y preciso. Dennis continúa dando lo mejor de sí, esto podemos verlo en la pieza que abre el disco, "Slip On Through", que trata de captar la energía caliente de la década con algunos gramos de soul, y como siempre, entre deliciosas armonías vocales y un gusto por la inmediatez y por enganchar a la primera. Su habilidad progresa y otra muestra de ello es "Got To Know The Woman", todo un rock and roll setentero de adictivo estribillo, matices rhythm and blues y voces en crescendo entre el gospel y el soul. Pero la mejor de su triunvirato para este disco es sin lugar a dudas "Forever", emparentada sentimentalmente con "Without You" de Badfinger (que popularizaría Harry Nilsson), y que es un mosaico pop puramente emocional en el que se tocan como un arpa las fibras del alma: al final resulta una de las mejores canciones del disco, y también una de las baladas más logradas y penetrantes de la década, escrita por alguien que en los primeros discos de los Beach Boys se contentaba con grabar sus solos de batería.
Y a pesar de su ocaso, Brian también reluce, aportando temas del calibre de "This Whole World", divertida, fantasiosa y extremadamente romántica, como una canción de Disney pero sin el azúcar, y además cantada con pasión por Carl, que mece su voz como le da la gana. A gran nivel raya también "Add Some Music To Your Day", un estándar pop de inmaculado preciosismo, cristalino y con un estribillo sosegado pero claramente ganador. Bruce Johnston ya había demostrado que podía aportar cosas en 20/20, y aquí prosigue su línea ascendente. Las pruebas son "Deidre", que parece un clásico, una cancioncilla melancólica y desenfadada que atrapa sin remedio desde que empieza y con detalles tan emocionantes como las flautas que rodean la voz de Bruce; y la melodramática "Tears In The Morning", una canción de hermosa tristeza envuelta en celofán, como todo el disco, y adornada con bonitos detalles que la hacen más entrañable si cabe. En "It's About Time" participa casi todo el grupo, es la más rabiosa de todas, entre trompetas hostiles y guitarras masculinas. Wilson aparece otra vez en "All I Wanna Do", tan sencilla que da la impresión de conocerla de toda la vida, y aun así vaporosa y cargada de misterio, con un Mike Love que no puede ser más conciso cantando. Y, claro, otro trallazo de Brian: "Our Sweet Love", mi favorita del disco si no fuera porque también existe "Cool, Cool Water", otra vez la voz de Carl para adaptarse a la perfección a las exigencias de la música mística de Brian, toda una historia sentimental que concluye en un estribillo casi espiritual y que lanza los sentimientos al espacio entre infinitas armonías encajadas con precisión milimétrica.
En la penúltima canción toma Al Jardine el protagonismo: "At My Window" es una excursión al campo, una canción atmosférica donde las haya que convierte la música en impresiones palpables, una jornada tranquila entre pájaros y árboles, muy dulce, muy trabajada, otra candidata a la banda sonora de una película de Disney. Pero sin lugar a dudas, lo que hace que este disco pase de muy bueno a excelente, es el último bombazo: "Cool, Cool Water". Ya hacía varios discos que los Beach Boys recurrían a los restos del naufragio de Smile, pero es que este tema queda perfecto en un disco como Sunflower y arroja luz sobre lo que Brian imaginaba que iba a ser su obra maestra. En la canción, unos coros se repiten una y otra vez durante cinco minutos, pero suena todo tan sencillo que realmente parece música extraída de la naturaleza, el tiempo se pasa volando mientras la escuchamos y nos dejamos llevar por sus sensaciones de paz y armonía con, esta vez sí, una enorme sonrisa en la cara y un chispazo de entusiasmo en el pecho. Al acabar, no tendremos más remedio que empezar de nuevo el disco. Fabulosa. Un Smile que hubiese mantenido este nivel habría sido una de las obras artísticas más descomunales de la historia.
Disco romántico, carismático e inspirador de buenos sentimientos, Sunflower no sólo fue el penúltimo peldaño antes de Surf's Up, sino que al igual que Friends, pasó a formar parte de la historia de miles de personas. Algunos álbumes nacen con aromas especiales y susceptibles de crear un mundo paralelo en el que ocultarse y ser feliz. El sol de Sunflower nunca ha dejado de irradiar para aquellos que se han tumbado tranquilamente a la sombra de sus canciones.
The Beach Boys. Sunflower (1970)
Acaba la semana, pero no lo hace todavía el ciclo de los Beach Boys más oscuros. El próximo lunes se cierra el círculo con Surf's Up, el último disco de melodías y belleza antes de que los Beach Boys cayeran de pleno en el letargo de los setenta.
Textos recomendados:
Revista Efe-Eme. Opinión de Fran Fernández -integrante de Australian Blonde y La Costa Brava- sobre Sunflower, en el apartado "Punto de partida", e indicativa de los prologandos efectos de Sunflower: "No voy a hablar de Pet sounds, me gustaría hablar un poco de Sunflower. Después de las crisis nerviosas sufridas por Brian Wilson tras la grabación de Good Vibrations, este disco de 1970 tal vez sea el que más resista una comparación con aquél del 66, y supone a la vez un renacimiento, y (junto a Surf’s up. Van juntos en las reediciones de los CDs) un canto del cisne (...) Tal vez tenga uno de los mejores “encadenados” de la historia: “Deirdre”, “It’s about time”, “Tears in the morning”, “All I wanna do” y “Forever”. Hay algo que me atrae mucho en estas historias tan americanas de ascenso, caída y segunda oportunidad. Sin ir más lejos, pienso ir a ver Rocky Balboa. Y cada vez que escucho este disco una infinita sensación de belleza y melancolía se apodera de mí."
"The Beach Boys. Sunflower (1970)". Artículo en Aloha Pop Rock, página a la que hay que reconocer su ingente trabajo, a pesar de que a veces no acaben de controlar cierta pedantería innecesaria.
The Beach Boys Spain. La página más completa sobre los Beach Boys en español, muy cuidada y con un interesantísimo foro centrado exclusivamente en el grupo.
6 comentarios:
Una auténtica gozada de comentarios la que nos has dejado, sobre ese período de oculto esplendor de los Beach Boys. Sin duda, para desgranarlos poco a poco y con tiempo, ya que están llenos de acertados comentarios e interesantes notas.
La verdad es que todos y cada uno de estos discos tienen una belleza muy especial, y demuestran que los Beach Boys deben estar ´por derecho propio entre los más grandes y que sí tuvieron una rica vida musical tras el espectacular Pet Sounds y el fallido Smile.
Te queda Surf's up que para mi es otra de sus obras cumbres.
Saludos !
Superfan de este disco, sí. Mi favorito de esta etapa después del Surfs Up. La reedición en doble cd es ideal para hacer caer del caballo a quien diga que los Beach Boys estaban acabados a estas alturas de la película. Forever: buffff, los pelos de punta otra vez.
Totalmente de acuerdo, mr_Pleasant, los Beach Boys son grandes y su discografía disfruta de una riqueza insospechada para quien se queda en Pet Sounds.
Probertoj: lo quería mencionar en el último artículo, lo cierto es que la reedición en CD doble es una pasada, Sunflower y Surf's Up, increíble (por cierto, qué gozada de ediciones, con bonus tracks y demás).
Interesantísimas entradas.
Adoro 'Sunflower', probablemente uno de mis 3 discos favoritos junto a 'Today!' y 'Pet Sounds' aunque creo que me gustan todos ('Surf's up', 'All summer long'... todos!)
Para mi, por lo que me hacen sentir (y sin entrar en ningún tipo de polémica) el grupo más grande que jamás haya existido.
Te dejo la reseña del disco que escribir para mi blog:
http://beausoilel.blogspot.com/2008/09/beach-boys-ultimos-sesenta-viii.html
Asi como un blog donde se dedica a analizar, canción a canción, el Sunflower: http://recordingsunflower.blogspot.com/
Personalmente no me gustan nada las reseñas de Aloha. Me resulta irrisorio que no puedas copiar nada del texto de la pagina, !como si alguien quisiera plagiar esos articulos tan llenos de topicazos y tan mal redactados! No tienen opinion alguna, solo una serie de datos (que puedes encontrar en cualquier otra parte) y una serie de adjetivaciones que dan pena de la cantidad de lugares comunes y escasos recursos que emplean.
Una obra maestra este álbum, ya me lo encargue en vinilo. He empezado mi colección de The Beach Boys en vinilo, llevo poco, pero por ahí voy. Hasta ahora tengo el Today! y Pet Sounds, y pues el Sunflower en días me llega. Me gusta mucho esta banda. Y este álbum de mis favoritos de todos los tiempos. No hay ninguna track que falle.
All I Wanna Do, según muchos (y wikipedia) la primera canción de chillwave. Ídolos Beach Boys. Me agrada tu blog.Un saludo
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